El padre de Kasia, un acaudalado magnate naviero, le hace saber que ha arreglado ya su casamiento con Lord Stefelton, para salvarla de los cazafortunas. Kasia se horroriza y asegura que sólo se casará por amor. Su padre indignado, le espeta que sin él, ella no podría mantenerse, ni sabría cómo ganarse tan siquiera un penique. Decidida a probarle que está equivocado, acepta un trabajo como institutriz de un huérfano de siete años, llamado Simón, sobrino del Duque Dreghorne y quien vive también en su castillo. El duque es un héroe de la guerra y tiene la reputación de ser muy valiente. Simón es un niño difícil y su comportamiento es tan rebelde que ninguno de los familiares del duque quiere hacerse cargo de él. Un día, cuando salen a cabalgar, Simón y Kasia son raptados.
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