Christina Dood - Serie My First

02- Castillos en el Aire.

A su regreso de la Santa Cruzada, Raymond, conde de Avraché, confidente del rey y primo de la reina de Inglaterra, debe contraer matrimonio por orden del monarca con Juliana de Lofts, una rica heredera y señora de dos importantes castillos. Sin embargo, los hechos no siguen el curso esperado: en varias ocasiones, y sin posteriores disculpas, la dama lo ha dejado plantado frente al altar, convirtiéndolo en el hazmerreír de la corte.¿Qué razones se ocultan tras el comportamiento de lady Juliana? Raymond decide averiguarlas y, para ello, oculta su identidad y se presenta ante tan difícil señora como maese constructor. Aunque existe un pequeño problema: ¡desconoce el arte de edificar fortalezas o barreras de defensa! Bajo este disfraz, el caballero penetrará en el interior del castillo y descubrirá a una delicada dama de valor y astucia incomparable, una madre entregada y mujer indomable que guarda un secreto insospechado. Hija única de un poderoso terrateniente, Juliana es una mujer en un mundo de hombres: gobierna sus tierras, administra los beneficios y conoce a cualquiera que pise y habite sus dominios. Viuda y huérfana, es ella quien dirige, sin necesidad de un hombre que la someta y la menosprecie. Pero esta aparente fortaleza no es más que un refugio para su mente torturada por un pasado doloroso. Por el momento, las murallas de su castillo la custodian, aunque el dulce roce de un enigmático caballero puede doblegar sus defensas.Desde el día en que el rey se la ofreció como esposa, Raymond se ha preguntado cómo sería lady Juliana. Ya podido comprobar que se trata de una mujer de carácter, osada e insolente hasta el punto de desobedecer la orden del monarca. Pero, una vez frente a ella, el dolor y despecho sentidos frente al altar se tornan en ternura ante el temple y la belleza de esta valiente dama. Ella desconoce su verdadera identidad, por lo que deberá ser precavido. Si desea expugnar las murallas de su alcoba, los secretos que alberga en su interior no deben ver la luz. 

Mio