En un intento por salvar a su hermanastra de las garras de un cazadotes, Oliver Brandon la internó en una distinguida escuela para señoritas; pero su sorpresa fue mayúscula al ver que una de las respetables profesoras era la misma mujer que había visto en una fiesta… en una situación bastante comprometida.
A Helen de Coverdale no le extrañaba que Oliver Brandon tuviera serias dudas para dejar su hermana a su cargo. Pero ¿se prestaría Oliver a escuchar su versión de la historia?
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